Semana Mundial de la Lactancia Materna
Semana Mundial de la Lactancia Materna
Origen
La Semana Mundial de la Lactancia Materna se celebra cada año del 1 al 7 de agosto y fue instaurada oficialmente en 1992 por la Alianza Mundial pro Lactancia Materna (WABA), con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF. Conmemora la firma de la Declaración de Innocenti (1990), que marcó un compromiso global por proteger, promover y apoyar la lactancia materna.
En España, esta semana cuenta con el respaldo de instituciones como el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, entre ellas Castilla y León, que la incorporan dentro de sus estrategias de promoción de la salud pública.
¿Por qué es importante la lactancia materna?
La lactancia materna es un derecho de la infancia y un pilar fundamental de salud pública, con beneficios comprobados a corto, medio y largo plazo.
Beneficios para el bebé
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Nutrición óptima: contiene todos los nutrientes necesarios para el desarrollo en los primeros 6 meses.
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Protección frente a enfermedades: disminuye infecciones respiratorias, digestivas, otitis, y reduce el riesgo de muerte súbita del lactante (SMSL).
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Mejora del desarrollo neurológico: favorece la maduración cerebral y el coeficiente intelectual.
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Prevención de enfermedades crónicas: menor riesgo de obesidad, diabetes tipo 1 y 2, hipertensión y alergias.
Beneficios para la madre
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Recuperación tras el parto: ayuda a reducir hemorragias y favorece la involución uterina.
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Prevención de enfermedades: reduce el riesgo de cáncer de mama y ovario, así como de diabetes tipo 2.
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Bienestar emocional: refuerza el vínculo con el bebé, reduce el estrés y puede prevenir la depresión posparto.
Beneficios para la sociedad
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Menor gasto sanitario: al reducir enfermedades infantiles y maternas.
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Menor impacto ambiental: no necesita envases, transporte ni producción industrial.
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Mayor equidad: garantiza alimentación de calidad sin importar la situación socioeconómica.
Recomendaciones oficiales
Según la OMS y la Asociación Española de Pediatría (AEPed):
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Se recomienda lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses.
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A partir de los 6 meses, debe introducirse la alimentación complementaria saludable, manteniendo la lactancia hasta los 2 años o más, según el deseo del niño y la madre.
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La lactancia debe hacerse a demanda, tanto de día como de noche, sin horarios rígidos.
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La lactancia materna también es posible en embarazos, partos múltiples y en combinación con otros tipos de alimentación si es necesario (lactancia mixta o diferida).
¿Qué pasa si hay dificultades?
Aunque la lactancia es un proceso natural, puede requerir aprendizaje y apoyo. Es común que surjan dudas o dificultades:
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Dolor al amamantar o grietas.
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Dudas sobre la cantidad de leche.
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Problemas de agarre o succión del bebé.
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Obstrucciones mamarias, mastitis o infecciones.
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Baja ganancia de peso del lactante.
En estos casos, es esencial buscar ayuda profesional especializada. En Castilla y León, puedes acudir a:
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Matronas y pediatras de atención primaria.
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Consultoras de lactancia IBCLC.
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Grupos de apoyo a la lactancia, coordinados desde centros de salud o asociaciones locales.
Contar con asesoramiento adecuado aumenta las tasas de lactancia y evita abandonos precoces.
¿Cómo puedo participar?
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Infórmate en tu centro de salud sobre talleres, actividades o charlas.
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Acude o colabora en grupos de apoyo a la lactancia.
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Difunde contenido veraz en redes sociales, siguiendo el lema anual de la WABA.
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Apoya a madres lactantes con escucha, disponibilidad y respeto.
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Si eres profesional sanitario, fórmate en lactancia materna para ofrecer acompañamiento actualizado y respetuoso.
Para saber más
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World Breastfeeding Week (WBW) - World Alliance for Breastfeeding Action

- Taller de lactancia materna | Escuela de pacientes
















