Se deben realizar todas las tareas y actividades necesarias para la correcta consecución del proyecto, es decir, para implantar las recomendaciones de las guías elegidas y evaluar los resultados.

Entre las actividades a realizar podemos destacar:

  • difusión de la iniciativa, en la institución y en otros entornos
  • creación de estructuras organizativas (por ejemplo, un comité gestor) que respalden la implantación y favorezcan la interacción entre estructuras horizontales y verticales
  • formación de impulsores, que son profesionales a pie de cama que adquieren el compromiso de facilitar el desarrollo de la implantación y son los referentes para el resto de los colaboradores
  • diseño de un plan de acción para la implantación de las recomendaciones y estrategias a seguir, que debe ser revisado y actualizado periódicamente
  • diseño de un plan de evaluación, que contemple indicadores de estructura, procesos de cuidados y resultados en salud
  • operativizar las recomendaciones de las guías de buenas prácticas (GBP), con la actualización de los protocolos existentes y la elaboración de otros nuevos;
  • difusión y formación de los nuevos procedimientos
  • entrega de informes periódicos (cuatrimestrales) de las actividades realizadas y evaluaciones mensuales de los resultados alcanzados con la aplicación de las guías de buenas prácticas (GBP)
  • elaboración de un plan de sostenibilidad.