La formación continuada es un proceso de enseñanza-aprendizaje activo y permanente al que tienen derecho y obligación los profesionales; dicha formación se inicia al finalizar los estudios de pregrado/grado o de formación sanitaria especializada y está destinada a mantener la excelencia de sus profesionales a través de la actualización y mejora de las competencias profesionales para alcanzar los estándares de calidad de los servicios prestados a los ciudadanos, según las necesidades demandadas por la sociedad.