• La Junta de Castilla y León y la Comunidad de Madrid van a formalizar un convenio específico de colaboración en transporte sanitario terrestre no urgente y en transporte sanitario urgente y de emergencias, al objeto de optimizar los recursos de ambas autonomías con el objetivo de ofrecer una mayor calidad asistencial en esta materia a los ciudadanos de las zonas limítrofes de ambas regiones.

El Consejo de Gobierno de la Junta ha autorizado hoy al consejero de Sanidad, en su condición de presidente de la Gerencia Regional de Salud, a formalizar un convenio de colaboración en materia de transporte sanitario entre las Comunidades de Castilla y León y de Madrid, acuerdo que emana del protocolo general de colaboración que firmaron los máximos representantes de ambas autonomías, Esperanza Aguirre y Juan Vicente Herrera el pasado 4 de junio.

El objetivo de dicho convenio específico, cuya vigencia será anual y que queda supeditado a su aprobación por las Cortes de Castilla y León, por la Asamblea de Madrid y por parte de las Cortes Generales, se plantea con el objetivo final de optimizar los recursos disponibles para la prestación de un servicio especialmente relevante en las zonas limítrofes de ambas regiones, entre las que existe una especial circulación de bidireccional de personas y de pacientes con una amplia repercusión asistencial sanitaria.

Con este acuerdo se plasma la oportuna colaboración entre las Comunidades castellana y leonesa y madrileña en materia de transporte sanitario terrestre no urgente y transporte sanitario de urgencias y de emergencias, colaboración que beneficiará a la población de las áreas vecinas de ambas regiones que, en Castilla y León, se calcula cercana a las 68.000 personas pertenecientes a las zonas básicas de salud de Riaza, La Sierra, Segovia rural, San Ildefonso-La Granja, El Espinar, Las Navas del Marqués, Cebreros y Sotillo de la Adrada, situadas en las provincias de Segovia y de Ávila.

En lo referente a los medios con los que cada autonomía contribuye a este dispositivo y, más concretamente, al apartado del transporte de urgencias y emergencias, Castilla y León aporta dos ambulancias de soporte vital avanzado, cinco ambulancias de soporte vital básico y tres helicópteros medicalizados; por su parte, la aportación de Madrid se plasma en seis ambulancias de soporte vital avanzado, siete soportes vitales básicos y dos helicópteros medicalizados.

En la parte referida al transporte sanitario terrestre no urgente, la Comunidad de Castilla y León asume el desplazamiento de los pacientes madrileños sometidos a tratamientos periódicos que se encuentren residiendo temporalmente en alguna de las zonas básicas de salud indicadas en este convenio específicos, mientras que la Comunidad de Madrid hará lo mismo con los desplazamientos de aquellos pacientes de su región que estuviesen ingresados en centros sanitarios castellanos y leoneses, ya sea cuando precisen transporte sanitario al recibir el alta para regresar a su domicilio o cuando sean trasladados a centros asistenciales de Madrid.