La parotiditis (paperas) es una enfermedad infecciosa producida por el virus de la parotiditis. Se caracteriza por la inflamación aguda unilateral o bilateral, dolorosa, de la parótida u otras glándulas salivares. Es una enfermedad de carácter leve aunque la gravedad y las complicaciones pueden ser mayores si se padece en la edad adulta.

Transmisión:

El virus se transmite persona-persona por vía respiratoria a través de las gotitas de saliva que se producen al hablar, o por contacto directo con saliva de una persona infectada.

Una persona puede contagiar el virus desde 7 días antes de la aparición de los síntomas y hasta 9 días después, con un periodo de máxima transmisibilidad desde los 2 días anteriores al inicio de la enfermedad y los 4 días posteriores. Hay personas infectadas que no presenten síntomas de enfermedad pero sí pueden transmitir el virus.

Período de incubación y forma clínica:

Los síntomas aparecen entre 2 - 3 semanas después de haberse infectado.

La forma clínica más frecuente se caracteriza por la aparición de fiebre, malestar general e inflamación dolorosa de la glándula parótida y a veces otras glándulas salivares.

En poblaciones no vacunadas alrededor de un tercio de los sujetos expuestos sufren una infección inaparente o subclínica especialmente en niños pequeños y adultos. En poblaciones vacunadas completa o parcialmente con vacuna triple vírica los síntomas suelen ser más leves y cursar con menos complicaciones.

En ocasiones, puede afectar a otros órganos como el testículo (orquitis), ovario (ooforitis), páncreas (pancreatitis) y cerebro (meningitis urliana). Estas formas clínicas se presentan con más frecuencia cuando esta enfermedad se padece durante la edad adulta.

Prevención:

La medida más eficaz para la prevención de esta enfermedad es la vacunación.

En la actualidad, el Programa de Vacunaciones de Castilla y León recomienda en el calendario vacunal para toda la vida dos dosis de vacuna triple vírica (a los 12 meses y 3 años).https://www.saludcastillayleon.es/es/vacunaciones/calendario-vacunaciones-castilla-leon

Además, se recomienda la vacunación con triple vírica a los jóvenes y adultos nacidos a partir de 1970 no vacunados o sin historia documentada previa de cualquiera de las tres enfermedades frente a las que protege y que no presenten contraindicación médica.

La vacuna triple vírica es segura y eficaz. Las reacciones adversas son generalmente de carácter leve, siendo las más frecuentes de tipo local (dolor o quemazón en el punto de inyección) y la febrícula que puede aparecer a las 2 semanas de su aplicación. La administración de la vacuna a personas que han pasado la enfermedad o que han sido previamente vacunadas no comporta ningún riesgo adicional.

En Castilla y León la vacuna triple vírica se introdujo en 1981, como en el resto de España, administrándose una sola dosis a los 15 meses de edad. En 1993, se introdujo una segunda dosis a los 11 años, y en el año 2000, esta segunda dosis de se adelantó a los 6 años. Desde febrero de 2013 se adelanta la administración de ambas dosis: la primera a los 12 meses y la segunda a los 3 años de edad.

Epidemiología:

Antes de la introducción de la vacuna se consideraba una enfermedad típica de la infancia. Se producía con mayor frecuencia durante los meses de invierno-primavera apareciendo ciclos epidémicos cada 3-7 años, alcanzándose tasas de incidencia en torno a los 600 casos por 100.000 habitantes.

Desde la introducción de la vacuna en 1981, las coberturas vacunales fueron aumentando progresivamente alcanzándose en 1985 coberturas próximas al 80% lo que produjo un descenso brusco en la incidencia de la enfermedad, manteniéndose posteriormente una tendencia descendente.

En la actualidad las coberturas de vacunación están cercanas al 95%, manteniéndose en una situación de baja incidencia, interrumpida por la aparición de brotes de distinta magnitud. Estos brotes generalmente se producen por aumento progresivo de individuos susceptibles.

Más información: Situación epidemiológica de la parotiditis en Castilla y León