En cuanto la mujer sospeche que está embarazada debe acudir al médico.

Los controles que se realizan tienen como objetivo conocer la evolución del embarazo, valorar el crecimiento y desarrollo del niño y resolver las dudas y preguntas que plantee la embarazada. La frecuencia de las visitas será indicada por el personal sanitario.

Los controles más habituales que se realizan en el embarazo son:

  • Historia clínica detallada y entrega de la "Cartilla de Salud de la Embarazada", en la que se irán recogiendo los datos de los sucesivos controles.
  • Valoración de las condiciones de trabajo.
  • Exploración clínica, que incluye toma de tensión arterial y medición de peso y talla.
  • Exploración ginecológica y toma de muestra para citología.
  • Análisis de sangre y orina.
  • Ecografías. La ecografía es una técnica que no perjudica ni a la madre ni al feto. Permite obtener imágenes del feto y sirve para observar su crecimiento y descartar ciertas malformaciones.
  • Test de glucosa. Suele hacerse entre las semanas 24-28. Sirve para descartar la diabetes.

La amniocentesis está indicada en mujeres mayores de 35 años, en mujeres con hábitos tóxicos, o con antecedentes de enfermedades hereditarias.

Tiene un pequeño riesgo de aborto. Se extrae, por punción abdominal, una pequeña cantidad de líquido amniótico para ser analizado. Se suele realizar entre las semanas 16-20 y sirve de ayuda en el diagnóstico de malformaciones fetales.