18/07/2017
Fuente: Frontiers in Pharmacology

Se ha publicado este año una revisión crítica (Erviti J. 2017) Este enlace se abrirá en una ventana nuevasobre los diferentes aspectos que afectan al tratamiento farmacológico de la osteoporosis. El artículo destaca las deficiencias tanto en la evaluación como en la valoración de la eficacia y seguridad en el manejo de estos fármacos que son de amplia utilización y de uso prolongado. Se cuestiona que la terapia con fármacos sea una "solución" para las fracturas por fragilidad.

El artículo revisa la evidencia de fármacos para la prevención de fracturas en los últimos 30 años y los autores destacan las lecciones aprendidas de esta historia.

Los puntos clave del artículo son los siguientes:

Lecciones 1-5: La densidad ósea y la compresión vertebral morfométrica no son variables sustitutivas de la fractura fiables. De hecho, los criterios de valoración clínicamente relevantes son esenciales para evaluar los daños y beneficios en los ensayos clínicos. Existe la necesidad de evaluar el beneficio global de daño con ensayos bien diseñados, teniendo en cuenta que la terapia con fármacos puede no ser más efectiva en pacientes de alto riesgo.

Lecciones 6-10: en la prevención de fractura de cadera los bisfosfonatos y el ranelato de estroncio muestran una relación dudosa beneficio-daño; los resultados de denosumab no son concluyentes y no se ha demostrado ningún beneficio proveniente de calcitoninas o teriparatida. Después de décadas de uso generalizado, la eficacia de los medicamentos para la osteoporosis sigue siendo incierta, sin embargo los efectos adversos son más evidentes.

Conclusiones: Se necesitan con urgencia ensayos bien diseñados y de gran envergadura con períodos de seguimiento prolongados, midiendo los resultados clínicamente relevantes, como la fractura de cadera y otras fracturas incapacitantes, con el fin de comprender adecuadamente la relación beneficio-daño de los fármacos comúnmente prescritos.

Las agencias reguladoras deben ser más transparentes y hacer que los datos individuales de todos los ensayos clínicos estén a disposición pública, lo que permite una evaluación independiente y un análisis agrupado.