22/12/2014
Fuente: J Am Coll Cardiol

Se ha publicado un estudioEste enlace se abrirá en una ventana nueva de cohortes (N=1.556) sobre los efectos neurológicos producidos por el uso de adrenalina en la resucitación cardiaca. Tras analizar la funcionalidad neurológica en el momento del alta hospitalaria (escala Cerebral Performance Category – CPC) se ha observado menor probabilidad de supervivencia con buen resultado neurológico (CPC 1 o 2) entre los pacientes que recibieron adrenalina (17%) comparado con los que no la recibieron (60%) (p<0,001). Estos resultados siguen siendo consistentes al ajustar por factores de confusión potenciales -intervención percutánea coronaria, hipotermia, lactato en sangre y shock post paro cardiaco- (OR ajustada=0,32; IC 95% 0,22-0,47). También se observó un peor resultado neurológico cuanto mayor fue el tiempo transcurrido desde el paro cardiaco a la primera administración de adrenalina (OR ajustada=0,23 [IC 95% 0,12-0,43], a los 16-22 minutos); y cuanto mayor fue la dosis suministrada (OR ajustada=0,23 [IC 95% 0,14-0,37], más de 5 mg de adrenalina). Al margen de su indudable utilización en la recuperación de la circulación espontánea, es preciso confirmar qué momento de la resucitación y qué dosis puede ser las más convenientes para mejorar la supervivencia neurológica funcional a largo plazo.