17/01/2020
Fuente: Prescrire

El dolor articular y muscular forma parte del perfil de efectos adversos de las gliptinas, inhibidores de la dipeptidil-peptidasa 4 (IDPP-4), como la sitagliptina, utilizados como fármacos hipoglucemiantes en la diabetes tipo 2. En 2015, la FDA (U.S. Food and Drug Administration) Este enlace se abrirá en una ventana nuevaya advirtió sobre ello.


En la base de datos del Sistema de Informe de Eventos Adversos de la FDA (FAERS)Este enlace se abrirá en una ventana nueva y en la evidencia consultada, (Crikx_2014Este enlace se abrirá en una ventana nueva, Yokota 2012Este enlace se abrirá en una ventana nueva, Chaicha 2013Este enlace se abrirá en una ventana nueva) se identificaron casos de dolor articular severo asociado con el uso de inhibidores de DPP-4, con aparición precoz o tardía tras el inicio del tratamiento. Después de que los pacientes interrumpieron el tratamiento, sus síntomas mejoraron, generalmente, en menos de un mes. Algunos de ellos desarrollaron nuevamente dolor en las articulaciones cuando reiniciaron el tratamiento con el mismo medicamento u otro inhibidor de DPP-4.


En 2017, un metaanálisis, Men 2017Este enlace se abrirá en una ventana nueva, (67 ensayos; n=79.110) mostró que:

  • Los IDPP-4 se asociaron con un riesgo leve, pero significativo, de artralgia general (RR: 1.13, IC 95%: 1.04-1.22) y un aumento no significativo de riesgo de artralgia grave (RR: 1,44; IC del 95%: 0,83–2,51). Las incidencias de artralgia grave fueron relativamente bajas (0.11 y 0.06%).

  • Además, los análisis de subgrupos mostraron que la terapia complementaria/combinada y una mayor duración de la diabetes (> 5 años) fueron posibles factores asociados con el mayor riesgo de artralgia general, que suele corresponder con una diabetes más grave.


Sin embargo, este metaanálisis también cuenta con varias limitaciones:

  • La artralgia no se informó como criterio de valoración primario en ninguno de los ECA incluidos.

  • No se tuvo información detallada del tiempo exacto de aparición de artralgia o de cualquier otro problema. Por lo tanto, la causalidad no se puede inferir de los datos proporcionados.

  • En los estudios no se informó de las características basales de los pacientes relacionadas con los trastornos articulares, ni de los niveles de ácido úrico o de enfermedad autoinmune.


La revista Prescrire (noviembre 2019)Este enlace se abrirá en una ventana nueva, acaba de publicar los resultados de un estudio en el que se mostró que los pacientes que toman gliptinas están más expuestos a medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), y por tanto a sus efectos adversos, que los pacientes que toman otros hipoglucemiantes para la diabetes tipo 2.


El estudio identificó, durante el período 2012-2016, a pacientes que recibieron al menos tres prescripciones en un año de una gliptina o de uno o más medicamentos hipoglucemiantes de uso común para la diabetes tipo 2 (hipoglucemiantes orales, insulina glargina, insulina detemir, exenatida o liraglutida). Posteriormente se identificaron los pacientes que al año siguiente recibieron al menos una prescripción de hipoglucemiantes y al menos dos de un AINE o un opioide (como tramadol o codeína).


En promedio, cada año, aproximadamente el 30% de los pacientes expuestos a una gliptina también lo estuvieron al menos a un AINE, frente a aproximadamente el 24,5% de los pacientes expuestos a un medicamento hipoglucémico diferente. Esta diferencia fue estadísticamente significativa, incluso cuando se tuvieron en cuenta la edad y el sexo. Alrededor del 20% de los pacientes del grupo de gliptina estuvieron expuestos a un analgésico opioide débil.


Esta observación epidemiológica no demuestra la existencia de una relación de causa y efecto, pero constituye una señal que es consistente con los resultados de los ensayos clínicos que muestran que las gliptinas pueden estar asociadas a un mayor riesgo de dolor en las articulaciones. Es probable que este dolor pueda causar suficiente incomodidad para llevar a los pacientes diabéticos a usar AINE, agregando así sus efectos adversos (particularmente renales y cardiovasculares) a los de las gliptinas.


Debido a estos efectos adversos y a otros considerados graves, la revista Prescrire recomienda evitar el uso de gliptinas.




Comentario elaborado por Mª Rosa Miranda Hidalgo