14/3/2023

En la revista American Family PhisicianEste enlace se abrirá en una ventana nueva se establecen recomendaciones partiendo de una pregunta clínica y se da una respuesta en base a la evidencia encontrada, aportando recomendaciones finales basadas en guías de práctica clínica (GPC) sobre el tema tratado.


Pregunta Clínica


¿La trazodona es eficaz y segura para tratar el insomnio?


Evidencia


Un metanálisis, Yi et al_2018Este enlace se abrirá en una ventana nueva, examinó el uso de trazodona para el insomnio (7 ECA, 6 en ámbito ambulatorio y 1 con pacientes hospitalizados y ambulatorios; n= 429 adultos; edad media = 46,1 años; 58,2% mujeres). Se incluyeron pacientes con insomnio primario o secundario.

Los resultados primarios incluyeron la eficiencia del sueño (la relación entre el número total de minutos que el paciente duerme durante la noche con la cantidad de tiempo que pasa en la cama) y la calidad del sueño percibida por el paciente. Los resultados secundarios incluyeron la latencia del sueño (tiempo que una persona tarda en lograr realizar la transición de la vigilia total al sueño; la primera época de cualquier fase del sueño), el tiempo total del sueño, el número de despertares y el tiempo de despertar después del inicio del sueño.

Cuando se comparó en los pacientes la trazodona con el placebo:

  • No hubo una mejora significativa en la eficiencia del sueño; se vieron pequeños cambios o nulos en la calidad del sueño.
  • Hubo una disminución significativa en el número de despertares en pacientes que recibieron trazodona en comparación con placebo, sin diferencias significativas en otros resultados secundarios.

Una revisión Cochrane_Everitt 2018Este enlace se abrirá en una ventana nueva (n=3 ECA; n=370; adultos > 18 años), valoró la trazodona y se observó una mejora moderada en los resultados subjetivos medidos por el índice de calidad del sueño de Pittsburgh en comparación con el placebo.


Un estudio de cohorte retrospectivo, Amari et al_2022Este enlace se abrirá en una ventana nueva (n=313.083; adultos > 18 años), evaluó el riesgo de caídas en pacientes tratados con zolpidem, trazodona o benzodiazepinas para el insomnio en Estados Unidos. Los datos se recopilaron de dos bases de datos, una de ellas, Medicare. Los pacientes tratados con trazodona en comparación con pacientes sin trastornos del sueño de la misma edad y sexo en el grupo de control tuvieron:

  • Mayor tasa de caídas (3,34 % frente a 1,33 %) y
  • Mayor riesgo de caídas (OR = 2,36; IC 95 %, 2,27 - 2,44).

Los pacientes tratados con trazodona tenían un mayor riesgo de caídas (5,27/100 años-persona) en comparación con:

  • Zolpidem de liberación prolongada (2,55 por 100 años-persona),
  • Zolpidem de alivio inmediato (2,99 por 100 años-persona) y
  • Benzodiazepinas (3,85 por 100 años-persona).

Respuesta basada en evidencia


Eficacia:

La trazodona no debe usarse para tratar el insomnio:

  • Disminuye el número de despertares nocturnos y puede mejorar levemente la calidad subjetiva del sueño.
  • Sin embargo, no mejora significativamente el tiempo total de sueño, la eficiencia del sueño, la latencia del sueño, o el tiempo de vigilia después del inicio del sueño. (Fuerza de la recomendación: B, múltiples estudios de baja calidad).

Seguridad:

  • Trazodona causa más efectos adversos que el placebo. (Fuerza de la recomendación: B, ECA de baja calidad).
  • Trazodona también tiene mayor riesgo de caídas que el zolpidem o las benzodiazepinas. (Fuerza de la recomendación: B, estudio de cohorte retrospectivo).
  • Los pacientes tratados con trazodona, zolpidem y benzodiazepinas tienen tasas de caídas más altas que los pacientes no tratados.

Recomendaciones de la Academia Estadounidense de la Medicina del Sueño:

  • Las pautas de práctica clínica de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño para el tratamiento farmacológico del insomnio en adultos recomiendan no usar trazodona para el insomnio de inicio o mantenimiento del sueño.