- Abandone el consumo de tabaco.

- Es importante mantener la piel bien hidratada, y para ello se deben tomar líquidos en abundancia.


- Es preferible usar un jabón con ph neutro en la ducha diaria


- Hay que evitar los restos de jabón en la piel y secarse cuidadosamente poniendo especial interés

entre los dedos de los pies y en los pliegues del cuerpo entre los que suele mantenerse la humedad


- Es conveniente usar crema hidratante después de la ducha.


- Es preferible usar prendas de tejidos naturales (hilo, algodón, etc.).


- Recuerde autoexplorarse el cuerpo cuando se lave, para así poder detectar la posible existencia de

lesiones (heridas, manchas, nódulos, etc.).


- Modere la exposición al sol y utilice cremas con alto factor de protección.


Y recuerde que siempre que detecte problemas en la piel deberá consultarlo con los profesionales sanitarios.