El asma es una enfermedad del aparato respiratorio que se caracteriza por la inflamación de la vía respiratoria y el aumento de la producción de moco, con la consiguiente obstrucción al paso del aire, dando lugar a síntomas como tos, opresión en el pecho, pitidos, falta de aire o ahogo.

Aunque la enfermedad es crónica, la intensidad de los síntomas es muy variable, pudiendo cambiar a lo largo de los días, incluso en el mismo día, o de los meses.