Todos los médicos en ejercicio, tanto público como privado, en el ámbito territorial de la Comunidad de Castilla y León.


El resto del personal sanitario, tanto del sector público como privado,que durante su trabajo tuviera conocimiento de la posible existencia de alguna enfermedad de declaración obligatoria, debe comunicarlo a los responsables de la actividad asistencial de su centro de trabajo.


Los responsables de los centros con actividad asistencial deben notificar aquellos casos que en función de su cargo les comuniquen.