En el año 1993, tras detectar la necesidad de relación entre el sistema de salud y servicios sociales, se realizaron experiencias piloto de coordinación sociosanitaria en Valladolid, Murcia y el área 4 de Madrid. Posteriormente se desarrollaron los planes sociosanitarios en Castilla y León con la finalidad de dar una respuesta integral a la salud en su triple dimensión física, mental y social, pues el trabajo conjunto de ambos sistemas produce un efecto sinérgico muy beneficioso para las personas con necesidad de ambos tipos de atención.

Por otro lado actuaciones de éxito tanto nacionales como internacionales y el desarrollo de las nuevas tecnologías hacen posible implementar nuevas estrategias de atención con servicios innovadores que garanticen la calidad de la atención y la eficiencia. Actualmente la mayoría de las estrategias de salud se definen de forma global para todo el Estado y posteriormente se adaptan a la realidad de cada comunidad autónoma. Ejemplo de ello es la estrategia de la cronicidad, de la enfermedad mental, etc.